viernes, 13 de marzo de 2009

Con los ojos cerrados


Ayer en la noche vimos la entrevista en exclusiva que le hicieron al Profesor Jesús Neira y se me revolvió el estomago al escuchar su historia. Tenía una mezcla de sentimientos muy grandes, por una lado la emoción que produce escuchar su testimonio y ver su “milagrosa recuperación”, sus ganas de seguir viviendo, de luchar y de no arrepentirse de lo que hizo el pasado 2 de agosto -cuando defendió a una joven que estaba siendo maltratada por su pareja a las puertas de un Hotel de Madrid-. Defensa que casi le cuesta la vida, ya que el maltratador arremetió contra él sin piedad, dándole unos golpes tan fuertes que provocaron que el Profesor Neira estuviera 68 días en coma. Lleva 7 meses en el Hospital y aún le falta una última operación en el cerebro. Su hijo de 13 años fue quien lo ayudó en ese día, con todo lo que significa para un hijo ver como casi mataban a su padre. Es muy doloroso, pero lo más triste de toda la historia es saber que la mujer a quien defendió y por quien casi le quitan la vida, no ha tenido ni un solo gesto de agradecimiento hacia él y lo más duro es saber que ella a quien ha defendido es a su propio maltratador, diciendo que en realidad era “una buenísima persona”. ¿Qué duro, no?

Que falta de todo, qué poca coherencia y ganas de dañarnos la vida sin necesidad. El definir como “buenísima persona” a quien me insulta sin clemencia y es capaz de golpearme hasta hacerme sangrar delante de la gente es algo que me cuesta comprender y no solo eso -me da rabia-, mucha rabia que hayan mujeres que se “cieguen” hasta el punto de no poder reconocer el bien y el mal. Me da lástima. Pero lamentablemente en los casos de violencia doméstica no hay solo un culpable y una pobre víctima, hay dos culpables el que maltrata por maltratar y la que recibe el maltrato por haberlo elegido (en los casos que se ve desde un principio, pero la mujer sucumbe a la fantasía de “seguro que cambia” o “yo lo voy a cambiar” –gran ¡mentira!-) por mantenerse ahí y no tomar medidas (cuando ya has recibido el primer golpe), por no poder decir ¡YA! y buscar ayuda, por mantener las vendas en los ojos. Sé que no puedo generalizar y “meter a todas en un mismo saco”. Pero me duelen las personas y me duelen las mujeres que entran en este ciclo perverso y profundamente dañino de autodestrucción, donde los golpes se convierten en una droga de la que tristemente no pueden prescindir. Es muy doloroso.

Hay cosas que pasan en la vida producto de la mano del hombre que son realmente lamentables, difíciles de comprender e injustificables. Sin lugar a dudas se trata de una mala gestión de la libertad que todo tenemos y que a veces no somos capaces de manejar con madurez y generosidad. Estamos hechos para el amor y no para el odio, para dar vida y no para quitárnosla y menos para quitarle la vida a otros. Estamos hechos para cuidar y cuidarnos no para maltratar y dañarnos mutuamente.
Ojalá todas las mujeres maltratadas puedan abrir los ojos y se den cuenta que hay otro mundo a su alrededor, que están hechas del amor y para el amor, y que merecen ser sólo felices y que nadie tiene derecho a quitarles esta felicidad. Pido fuerza y valor para cada una de estas mujeres.
Al Profesor Neira mis palabras de admiración, de fuerza, orgullo por su valentía por seguir creyendo en el hombre, por defender a los débiles y por luchar día a día por su recuperación con fe y optimismo. Es usted un gran ejemplo. Gracias a Dios por hacer el milagro.
Un cariño para todos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Mi niña linda,quiero señalarte unas cositas,una de ellas es percibirte frente a mi cuando sastisfecho estoy leyendo tus escritos.No dudo que otros lectores tambien te perciban intima.Tienes una forma, un modo directo de narrar y describir cualquier tema que de inmediato, yo, en lo particular me identifico con toda esa emocion que transmites de forma apasionada. Sabes, me gusta tu estilo desenfadado, oportuno, coherente, espontaneo y natural, ah! y sin temores.Te felicito. La otra cosita es decirte: Valente ! ¡esa es mi niña!,que elegante y directa no deja controversia entre "victima y victimario".Eso es, sigue enfrrentando todos los temas por mas aspero y duros que puedan parecer. Hija la otra cosita para terminar, y lo copio textual.." Mi amor y mi energia te acompañan siempre.." Tu Nene feo...Ahora son de mi para ti.
Besitos.
Tu Papá Alfonso

Adriana Yépez De Dominicis dijo...

Gracias Papá!!! Tus palabras son siempre el mejor bálsamo de entusiasmo,apoyo y confianza para cualquier caminante que se encuentre "un poco cansado" y necesite más fuerza para seguir y tener fe que el camino es el correcto. Gracias. Te quiero mucho.