miércoles, 15 de abril de 2009

Pedro y Julia

Julia muy coqueta, camina despacio, se ve experta con las muletas, no pierde de vista a Pedro que camina a su lado, él muy pendiente de ella, cuidando cada paso y vigilante de que nada le pueda faltar. Ella se siente muy segura a su lado, tranquila y con una serenidad que provoca robarla. Se hacen ojitos mientras sonríen como si fueran dos adolescentes, el brillo de sus ojos sirve para esconder las miles de arrugas y el pelo blanco que tienen ambos.

La escena es cautivadora y no me atrevo a poner más palabras por miedo a estropearla.

Son mis amigos de la foto, Pedro y Julia. En realidad no sé sus nombres , tampoco los conozco, pero no pude resistir la tentación de tomarles una foto –con el mayor respeto que se merecen- porque era tanto lo que transmitían en cada uno de sus gestos, que me pareció un bonito mensaje de amor y esperanza dentro de un marco de sencillez y cotidianidad. Me encantó haber sido testigo de ese momento y asumí la atribución de mostrar la imagen. Es un milagro, que dice ¡sí se puede! llegar juntos y enamorados a la vejez, sueño de muchos y meta de pocos. Yo tengo sed de estas imágenes y me reconcilia encontrarlas. Soy consciente que el camino no es fácil, me imagino que tendrá muchas subidas, bajadas y llanuras –como todos los caminos-pero creo que depende en gran parte de la disposición que pongamos en él día a día, si lo vemos como nuestro único camino y por tanto me entrego en cuerpo y alma y lo cuido con todo mi amor y esmero, o si por el contrario lo veo simplemente como una alternativa hasta que me canse, en el último caso es más fácil abandonar a la primera, tentado por la curiosidad de qué habrá en otro lado, en otros caminos. No sé, no soy experta en el tema, tengo mis intuiciones, convicciones y creencias -como todos- mezclado con muchas ganas y un profundo optimismo. Quiero mi camino, yo lo elegí y soy feliz por haberlo hecho. Confío en la gracia que Dios nos da en el matrimonio, creo en esa mochila que nos regala a todos cuando decimos “sí quiero” y estoy segura que en ella debemos tener todo lo necesario para llegar juntos hasta el final del camino, como nuestros amigos Pedro y Julia. Qué Dios los bendiga a ellos y a todos los matrimonios que están en el camino.
Vuelvo a decir ¡sí quiero!

P.d. les dejo como regalo este video –que me envió Miri-y está genial. Gracias!


No hay comentarios: